Sergi Aguilar

Barcelona, 1946

Vive y trabaja en Barcelona

 

 

 

 

Las esculturas de Sergi Aguilar cuestionan y desafían las convenciones de los principales paradigmas que han dado forma a la historia de los medios en el contexto de España.  En los años noventa su obra incluía fotografía y  dibujo, los cuales tuvieron una gran influencia en el lenguaje de sus obras escultóricas. La obra artística de Aguilar está formada por sus experimentos con el hierro, y sus intentos de crear volumen por “dibujando en el espacio”, utilizando hojas de hierro para formar espacios vacíos.  Las esculturas de Aguilar son tanto el material como los espacios vacíos negativos que forman.  En sus propias palabras; “independientemente de si un espacio es virtual o no, lo que importa es la energía que el trabajo emite y por ende el territorio que genera”.

 

Las obras de Aguilar hablan en un lenguaje abstracto puro y geométrico. Interpretan la simetría como una medida espacial y cuestionan la apropiación de los territorios a través de la escultura. De esta manera las obras insisten en ser una reflexión sobre la propia escultura en relación con el entorno, el juego transformador de la luz y la sombra, y por lo tanto una expresión lírica como figurativa.