Category Archives: 2018

The Lisbon Totem #3, 2017

Inauguración: 26.9, 19 h

Exposición octubre – noviembre

 

Nos complace anunciar la primera exposición de Pedro Cabrita Reis en nuestra galería, en la que mostraremos un conjunto de obras recientes, con escultura, pintura y fotografía.

 

El trabajo de Cabrita Reis incluye una gran variedad de medios, desde fotografía y dibujo hasta pinturas y esculturas a gran escala, compuestas por materiales industriales, a menudo recuperados, como en el caso de la obra Floresta, 2017, que presentamos en la exposición, y que llegan a tener frecuentemente dimensiones arquitectónicas. En esta muestra encontraremos obras realizadas con diferentes materiales como acero, madera, aluminio, cristal, esmalte, bronce o acrílico. En palabras del artista “Todo lo que existe es materia que puede ser utilizada en la construcción de una obra de arte”, por tanto, no establece jerarquías entre los objetos y materiales con los que trabaja. Para Cabrita Reis, el material es la mirada y el pensamiento, que todo lo transforman.

 

Su obra investiga los límites entre arquitectura, escultura, pintura y fotografía, pese a que Cabrita Reis se considera a sí mismo ante todo como pintor. Su obra es tridimensional, a menudo de una manera muy personal, y pretende alterar, definir o cuestionar los límites del espacio. Su significado permanece misterioso y fascinante, el pensamiento toma forma en la materia, para llegar al espectador, provocando nuevas preguntas, vinculándose con su imaginación y con su experiencia.

 

Pedro Cabrita Reis comenzó su carrera en la década de los ochenta, como uno de los artistas más destacados de su generación, introduciendo un universo de referencias arcaicas y míticas, de memoria colectiva y revelación individual. Su obra tuvo un gran impacto en la cultura portuguesa e internacional, incorporando, en la herencia moderna más radical, la posibilidad de volver a disciplinas artísticas tradicionales: dibujo, pintura, escultura.

Aïda Andrés Rodrigálvarez & Pablo del Pozo

JOAN PRATS warehouse, Passatge Saladrigas 5, Barcelona

Con cita previa al 932 160 284

Exposición: 05/09/2018 – 26/10/2018

 

En el marco de artnou, Galeria Joan Prats presenta el trabajo de dos jóvenes artistas, Aïda Andrés Rodrigálvarez (Barcelona, 1985) y Pablo del Pozo (Badajoz, 1994).

 

Sus trabajos tratan la relación que se establece entre el individuo y el espacio que le rodea desde un punto de vista cotidiano. El territorio y la nostalgia, la búsqueda de un refugio, el paso del tiempo son temas importantes en su obra, junto con el medioambiente. Mostraremos instalaciones de los dos artistas, obras realizadas a partir de objectos encontrados y de materiales expuestos a los elementos.

 

Aïda Andrés Rodrigálvarez se interesa por la huella que la luz, el entorno y el paso del tiempo retienen sobre el papel. Las técnicas de la litografía y la fotografía estenopeica le permiten trabajar con una temporalidad dilatada, además de investigar el color. En su práctica artística, papel y tejidos son dejados a merced de los elementos, deveniendo así materiales fotosensibles.

 

Por su parte, las obras de Pablo del Pozo tienen un marcado carácter autobiográfico, vinculado a las experiencias y vivencias del artista. El sentimiento de pertenencia a un lugar, el desplazamiento y la nostalgia son temáticas que le preocupan. A partir de las características propias de los materiales que utiliza (barro, escayola, pigmentos y también objetos recuperados), busca hablar de la precariedad de la vida, generando así una reflexión en torno a la realidad cotidiana.

 

Aïda Andrés Rodrigálvarez vive y trabaja en Barcelona. Ha realizado el máster de producción e investigación artística (2015-6). Se licenció en Bellas Artes por la Universitat de Barcelona (2014) y en Arquitectura por la Escola Tècnica Superior d’Arquitectura de Barcelona (2010). Ha expuesto individualmente en la Fundació Arranz-Bravo de L’Hospitalet de Llobregat (2017), en la Acadèmia de Belles Arts de Sabadell (2016) y en Tinta Invisible, Barcelona (2014). Ha recibido varios reconocimientos como las becas del Institut Ramon Llull para la bienal Jeune Création Européenne, de producción Felicia Fuster (2018), Guasch-Coranty  (2016) y el premio Arranz-Bravo (2017)

 

Pablo del Pozo vive y trabaja en Barcelona. Es graduado en Bellas Artes por la Universitat de Barcelona (2017). Ha sido seleccionado en la Biennal de Valls, Premi Guasch-Coranty (2017), por lo que expondrá en el Centre Tecla Sala de L’Hospitalet de Llobregat (julio, 2018), y también  por la Bienal Jeune Création Européenne (2017-9) con exposiciones en museos de diversas ciudades europeas: Montrouge, Francia (2017); Hjørring, Dinamarca; Cēsis, Letonia; Cluj, Rumanía (2018); Como, Italia; Figueres y Amarante, Portugal (2019). También recibió el premio de creación de la Sala d’art Jove de la Generalitat (2017), por lo que participará en la exposición en dicha sala en junio de 2018.

Inauguración 21 de junio, 19:00 h        22/06/2018 – 14/09/2018

 

Galeria Joan Prats presenta Footprints, la primera exposición del arquitecto Josep Lluís Mateo.

 

 

A través de una selección de obras realizadas y proyectos, la exposición quiere acercarse a la trayectoria de Mateo de un modo no cronológico, buscando formas de narrar la arquitectura desde las temáticas inherentes a su práctica. La arquitectura de Mateo se caracteriza por una herencia de la modernidad, que se interesa por la búsqueda de la luz, un intenso diálogo con el contexto, y una conexión entre la idea y el material. Sus proyectos son reflexivos y estratégicos, hablan del espacio y cuidan la relación entre lo mineral y lo vegetal.

 

Maquetas, fotografías, vídeos, collage y esbozos permiten aprehender la complejidad de su proceso creativo y constructivo. Encontramos, por ejemplo, materiales históricos de proyectos tan emblemáticos como la urbanización del pueblo medieval de Ullastret, maquetas que materializan la evolución de un concepto constructivo, como es el caso de la fachada del Centro de Convenciones Internacional de Barcelona, o fotografías que muestran la interacción de la obra con su entorno.

 

‘Un recorrido, una trayectoria, se compone de una sucesión de puntos, de pasos, de huellas… que, miradas en su conjunto, nos indican una dirección, nos revelan (o no) su sentido.

Aquí, sin voluntad de trazar la línea, enseñaremos unos cuantos puntos, algunas huellas de nuestro trayecto.

Así otros podrían trazarla.

Estos momentos se explican con los materiales que los produjeron.

Aunque la arquitectura es un fenómeno complejo en su resultado (atiende a la materia, al espacio, al uso, a la economía…), en su producción, hay un momento inicial de síntesis en donde se genera la energía necesaria para su desarrollo.

También hay algún momento final que sintetiza, en un segundo, como un flash, todo el esfuerzo realizado.

Mostrar estos materiales iniciales, que condensan la idea, y algunos documentos finales, que iluminan la realidad, es el objetivo de esta exposición.’

Josep Lluís Mateo

 

 

La exposición destaca el trabajo de fotógrafos que acompañan la visión de Josep Lluís Mateo como Aldo Amoretti, Gabriele Basilico, Jordi Bernadó, Jan Bitter, Luc Boegly, Ferran Freixa, Adrià Goula, Albert Masias y Xavier Ribas.

 

 

Josep Lluís Mateo es arquitecto por la Escola Tècnica Superior d’Arquitectura de Barcelona (ETSAB) y doctor “cum laude” por la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC). Desde 2002, es catedrático de Arquitectura y Diseño en la ETH-Eidgenössische Technische Hochscule Zürich. Ha impartido conferencias y cursos en las principales instituciones académicas y profesionales del mundo, entre otras: académico invitado en el J.P. Getty Center en Los Ángeles, profesor invitado en Harvard University-GSD y en AHO Oslo.

 

En su carrera, galardonada con el Premio A+2011 a la mejor trayectoria profesional, destacan obras como la urbanización del pueblo medieval de Ullastret, Girona (Premio Bienal de Santander 1991); el plan de ordenación de la zona deportiva de la Universitat Autònoma de Barcelona (mención especial Premios FAD de Arquitectura e Interiorismo 1993); el complejo de viviendas en el muelle de Borneo en Ámsterdam (Premio CEOE 2001); la vivienda unifamiliar en Mallorca (Premio a la Mejor Obra en el Apartado de vivienda unifamiliar 1997-2001 otorgado por el Colegio Oficial de Arquitectos de las Islas Baleares); el Centro de Convenciones Internacional de Barcelona – CCIB (Premio Top International Purpose 2009 – C&ITE Magazine y Oro al Mejor Centro de Convenciones en el Extranjero 2010 – M&IT Industry Awards); la Sede Central del Deutsche Bundesbank en Chemnitz (2004, Alemania); el Colegio Mayor Sant Jordi en Barcelona (Trofeo Archizinc 2008); el edificio WTC Almeda Park de Cornellà, Barcelona (Premio A+ a la arquitectura para el trabajo 2010); La Factory, edificio de oficinas en Boulogne-Billancourt, París (Premio NAN Arquitectura y Construcción 2010); la Sede Central de la compañía PGGM en Zeist, Holanda (Premio NAN Arquitectura y Construcción 2011); la Filmoteca de Catalunya (2012, Barcelona); el Centro de Cultura Contemporânea, como pieza culminante de la renovación del centro histórico de Castelo Branco (2013, Portugal); y Bayonne. Entrée de ville, remodelación urbanística del frente urbano del río Adour, incluyendo proyecto edificatorio (2016, Francia). Su obra ha sido extensamente publicada y expuesta, entre otros lugares, en el MoMA (Nueva York, 2006), en el Pavillon de l’Arsenal (París, 2009), en la Bienal de Venecia (2012) y en la Galerie d’Architecture (París, 2013).

 

 

Para facilitaros más información e imágenes, contactad con galeria@galeriajoanprats.com

 

Galeria Joan Prats presenta la exposición Edicions II de Muntadas, que recoge una selección de trabajos seriados que el artista ha realizado desde 2003 hasta la actualidad en diversos formatos: publicaciones, prints, vídeos, objetos, instalaciones y otros materiales gráficos. Esta exposición completa el trabajo iniciado en la exposición Edicions, realizada en la Galeria Joan Prats en el año 2003.

 

« La primera vez que Muntadas me habló de la exposición Edicions II en la Galería Joan Prats, se refirió a ella como una “exposición de deltas”. Le pedí que profundizara sobre esta cuestión: “mis proyectos son uno, son unitarios. Pero estos se diversifican en cantidades ingentes de postales, puede que hasta 100.000 postales, también pueden incluir 17 placas metálicas que se distribuyen por la ciudad a modo de señalización, y una página web. O sea que el proyecto finalmente aparece como la suma de tres conjuntos de restos; esto es, de deltas” (…)

 

Las ediciones son los medios que han permitido a Muntadas conseguir una circulación más porosa y plural, con la capacidad de multiplicarse e intervenir así en medios diversos y con diferentes temporalidades. Mientras que en sus proyectos habitualmente se encuentra la realización de un video, de una instalación o de una intervención urbana, en sus publicaciones, en cambio, no se encuentra habitualmente la realización de un único elemento. (…)

 

Una noción considerablemente genuina de proyecto también se ha ido perfilando a lo largo de la carrera de Muntadas. El artista aborda el proyecto, por un lado, en tanto que lógica de procedimiento serial y basada en la repetición de procedimientos y estrategias. Pero, a la vez, el proyecto también se define en su caso como una lógica de trabajo in progress y que genera momentos de apertura. De esta manera, si, tal como declara Muntadas, el proyecto le permite, por un lado, huir de un tipo de práctica intuitiva e inmediata y desarrollar plataformas de trabajo a largo plazo, por otro, esta noción también le ha ayudado a vertebrar entornos flexibles y abiertos a la impredecibilidad. (…)

 

En el trabajo editorial y las publicaciones es donde se han experimentado con precocidad y con más intensidad que en cualquier otro medio los modos colaborativos que han acabado por impregnar todo el trabajo de Muntadas.  Se encuentra aquí un despliegue de estrategias que catalizan la traducción, ya no solo como metáfora, sino que, muy especialmente, como un proceso de intercambio bidireccional.»

 

Fragmentos del texto de Oriol Fontdevila “Olvido de pez. Ediciones anfibias”, del catálogo de la exposición.

 

 

Muntadas, nacido en Barcelona, vive en Nueva York desde 1971, fue un pionero del vídeo y las instalaciones a mediados de los setenta, y continuó trabajando con fotografía, vídeo, instalación, audio, e intervenciones urbanas. Iteraciones de sus proyectos icónicos, como Between the Frames: The Forum (1983-1993), The Board Room (1985), y las series en curso On Translation (1995- …) y The Construction of Fear (2008- …) –se han expuesto en instituciones y galerías de Norteamérica, Suramérica, Europa y Oriente Medio. Muntadas participó en las ediciones de la Documenta de 1977 y 1997, la Whitney Biennial de 1991, la Bienal de São Paulo de 1983, la Bienal de La Habana de 2000, la Bienal de Taipéi de 2002, la Bienal de Gwangju de 2004, la Bienal de Estambul de 2011, y la Trienal de París de 2012. En 2005, representó a España en la Bienal de Venecia, donde creó un proyecto integral sobre la evolución arquitectónica de la Bienal al largo de su historia. Sus obras han sido incluidas en exposiciones en el MACBA, Barcelona; el Laboratorio Arte Alameda, México DF; el Museo de Weserburg, Bremen; en el Espacio Fundación Telefónica, Buenos Aires; en Württembergischer Kunstverein, Stuttgart; y en Estação Pinacoteca, São Paulo. Desde el 2011 ha estado trabajando en el proyecto Asian Protocols, presentado por primera vez al público en el Total Museum de Seúl (2014), y por segunda vez en 3331 Arts Chiyoda de Tokio (2016). El próximo paso del proyecto será su desarrollo en China.

 

Se ha editado un catálogo con motivo de la exposición

 

Presentamos Phasma, la séptima exposición de José María Sicilia en Galería Joan Prats, donde mostramos su trabajo reciente, con obras abstractas que incorporan tejidos y bordados y cuyas formas proceden de sonogramas.

 

La palabra que da título a la exposición, Phasma, de origen griego, designa los espectros y apariciones y remite, en palabras del propio artista, a “algo que aparece y desaparece, una mariposa que pasa batiendo las alas” y que “habla de la luz como pliegue”.

 

En la exposición, junto a la serie de Phasma, iniciada en Japón, encontramos la serie de El Instante, collages realizados a partir de dibujos de los últimos diez años, y obras de la serie de La Locura del ver. El proceso de creación de esta última serie está vinculado a una tecnología sonográfica que parte del experimento realizado en 1801 por Thomas Young, que permitió detectar la naturaleza ondulatoria de la luz a través de su difracción por dos rejillas alejadas sucesivamente de una fuente luminosa. Este experimento sirve como punto de partida para un programa informático que permite a Sicilia descomponer el sonido para crear unas cartografías de líneas y formas, unas composiciones de dibujos, pintura, collage y bordado que dan como resultado las obras de La Locura del ver.

 

Esta tecnología le da a José María Sicilia una herramienta para alcanzar una nueva profundidad. En este nuevo desarrollo de su obra encontramos todo aquello que ya estaba presente en su evolución artística anterior: la fuerza del color, el movimiento de la luz, un gusto por lo orgánico y el proceso de unificación y oposición que, desde los años ochenta, mostró su pintura. Su primera producción tenía un marcado carácter expresionista y profundizaba en la monocromía del blanco. Más adelante, su trayectoria se ve marcada por el hallazgo de la cera como material, por la aparición de las flores, las colmenas y también por la fotografía. Sicilia es un creador inquieto que ha basado su obra en el cuestionamiento de la forma. Es un artista que interroga, que no acepta moldes y siente la necesidad de quebrar los formatos, convocando la emoción del espectador.

 

José María Sicilia (Madrid, 1954) vive y trabaja en Madrid. Recientemente ha expuesto en el Museo Casa de la Moneda y Calcografía Nacional de Madrid (2017); Musée Delacroix de París (2015), Palacete del Embarcadero de Santander (2014); Matadero de Madrid y Fukushima Prefectural Museum of Art (2013); Hospital de la Caridad de Sevilla (2012); Maison Erasme de Bruselas y Amos Anderson Art Museum de Helsinki (2010); Nagasaki Prefectural Art Museum (2008). Su obra está presente en importantes colecciones públicas y privadas, entre las que destacan: Centre Georges Pompidou, París; MOMA, Nueva York; Fundació ‘la Caixa’, Barcelona; Colección Banco de España, Madrid; Collection Ville de Paris; MACBA, Barcelona; Galleria d’Arte Moderna, Turín; MNCARS, Madrid; Museum of Modern Art, Gunma, Japón; National Gallery of Australia, Canberra; Solomon R. Guggenheim Museum, Nueva York; The New York Public Library, Nueva York.

 

Nos complace presentar la exposición dedicada a Joan Ponç y a Joan Brossa, que inauguramos el jueves 30 de noviembre, y donde mostraremos obras de dos de los artistas más significativos en la recuperación del arte de vanguardia en nuestro país tras la guerra civil, unidos por una afinidad creativa y personal desde finales de los años 40 hasta principios de los 50 y unidos también a la historia de la Galeria Joan Prats, donde expondrían en diversas ocasiones.

 

En 1982, Joan Brossa mostró por primera vez en la exposición en la Galeria Joan Prats sus poemas objeto y visuales, poemas que realizaba desde 1954 y que eran entonces prácticamente desconocidos por el público. Más adelante, se mostrarían en otras exposiciones en la galería de Barcelona (1989, 1995, 1997) y de Nueva York (1989), y en la Feria de Basilea (1989). Por otro lado, Joan Ponç comienza su colaboración con la Galeria Joan Prats en 1978, con la exposición Fons de l’ésser. También expondría en 1983, Nocturns, en 1987 con dibujos de la época Pre-Dau Al Set, en 1994 y 1996 con dibujos de la Suite Geomètrica y en 1980 en la feria FIAC en París.

 

En palabras de Arnau Puig, en el texto realizado para esta exposición, “Un temperamento y carácter de la dimensión del de Brossa casi estaba obligado por el destino a encontrarse con alguien, Joan Ponç, que bajaba de las nubes”. Este gusto por la magia, la adivinación y lo oculto sería uno de los puntos de unión entre los dos artistas, que se conocieron en 1946. Ese año publicarían junto a Arnau Puig y a Enric Tormo el único número de la revista “Algol”, que quería ser un revulsivo delante del inmovilismo y la pérdida de idealismo de sus contemporáneos. Proponían una renovación de la mirada que se encuentra también en los monotipos que Ponç realizó para acompañar los ejemplares de la revista y que se aleja de la figuración naturalista predominante en el arte español de la época.

 

Además de este interés por las nuevas formas artísticas, las obras de Brossa y Ponç coincidían temáticamente en una preocupación y una crítica a la sociedad, junto con el interés por la cultura popular, el teatro y la magia que ya apuntábamos. Por eso, en aquellos años, se fueron sucediendo las colaboraciones entre los dos: el libro inédito Parafaragaramus (1948), dos números de la revista “Dau Al Set” (enero, 1949 y un inédito), el libro Em va fer Joan Brossa (1951), donde aparece un retrato de Joan Brossa por Joan Ponç, considerado el retrato más directo y sincero que haya tenido el poeta. La relación Brossa-Ponç quedó plasmada también en los poemas de Brossa alusivos a Ponç y en diversos dibujos de Ponç: los Dibuixos podrits (1947) y las Metamorfosis (1947), la suite Joan Brossa-Joan Ponç (1947), la cubierta del libro Dragolí de Brossa (1950), o el gouache Brossa, Brossa (1950), que mostramos en esta exposición.

 

Brossa y Ponç fueron en su momento dos abanderados de la renovación estética, siguiendo los pasos de J.V. Foix y Joan Miró. Brossa, que había conocido a Miró en 1941 a través del sombrerero y mecenas Joan Prats, en casa de J.V. Foix, los pondría en contacto con Joan Ponç. “Dau Al Set” ayudaría a restablecer los puentes con la vanguardia de ADLAN, impulsado por Joan Prats y Joaquim Gomis, y del GATCPAC.

 

Después de este periodo de afinidad y creatividad, en 1953 Joan Ponç se fue a Brasil, y cada uno de los dos artistas continuó su camino. A su vuelta a Cataluña, en 1962, Brossa estaba ya muy lejos del magicosurrealismo y se movía por una antipoesía ligada a la realidad mientras hacía experimentos plásticos de lo que sería su poesía visual. Su vínculo se iría diluyendo. Para Brossa, Ponç quedaría siempre ligado a “Dau Al Set”.

 

Esta exposición pretende mostrar las trayectorias de los dos artistas: una primera parte, con obras del periodo “Dau Al Set”, el momento de mayor afinidad entre Joan Brossa y Joan Ponç, y una segunda parte de la exposición, con obras posteriores, que permiten ver sus evoluciones en el ámbito plástico, y que se reflejan de la misma manera que en la suite Joan Brossa-Joan Ponç (1947).

ARCO Madrid. 21/02/2018 – 25/02/2018

 

CABELLO/CARCELLER
HERNÁNDEZ PIJUAN
LOLA LASURT
PEREJAUME
JAVIER PEÑAFIEL
FERNANDO PRATS
CAIO REISEWITZ
JULIÃO SARMENTO
JOSÉ MARÍA SICILIA
TERESA SOLAR ABBOUD

 

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